Versos Universitarios SXX-SXXI

Bienvenidos al espacio virtual del grupo literario UNIVERSOS en este nuevo siglo, el cual dará a conocer nuestra producción del siglo pasado y tratara ahora de promover la divulgación de nuestra producción actual, invitando a las y los jóvenes universitarios que deseen dar a conocer lo suyo más allá de estrictos controles académicos, a que nos visiten y dejen sus comentarios e interés de publicar en este espacio virtual y en cuanto nos sea posible nos comunicaremos con ustedes.

ESCRITOS DE EDWIN MONTENEGRO


















NOCTURNALES



1.


En el espesor de la madrugada
cuando las sombras deambulan
y la luz a penas vacila
para soslayar el trèmulo ambiente,
rara vez co-habitan mentiras
o màscara clara entre la penumbra.

El frìo se alza en muro
que traga palabras y gestos posibles...
Y noche y làgrima-hombre
se funden: sola simiente
que nutrirà mañana la vida en lo posible,
el amor y la voluntad
de tornar dìa la noche,
la luz en la palabra
y el pan en cada dìa.


??.2000



POSDATA V



Digàmonos con las manos

cuando se agoten las palabras,

que desde siempre nos rinden

y que a veces nos ensucian.



Que cuando muera la tarde

no quede espacio para silencios,

solo la desnuda claridad de nuestros cuerpos.



24.dic.99

 


POSDATA IV



Dèjame abrazarte,

asì, como si muriera,

para atiborrar de paz

mi alma que aùn yerra.



Jamàs olvides que el Hombre

es libre si atado a la conviccion

de llenar espacios vacìos,

ni que la libertad es tacto que arde

cuando mermamos juntos la soledad.



Prefiero ser consciente un instante de mi vida

que vivir enamorado y olvidado siempre.



Por eso abràzame y derràmame

toda tu alma sin importar què dure.

Serà oraciòn por la que entonces

habrè resucitado entre los muertos.



23.12.1999


SEMBLANZA



Amo si vienes al llover

entre las colillas remotas de la tarde,

donde estaban nuestros soles 

acudidos de mariposas

hoy polillas taciturnas

de la siempre vieja Managua.



Podrìa sentir que el frio

amaga apagarte haciendote asombro

de lo real ceñido al silencio

ahora sombra de lo vivido.



Amo cuando ardes asì, a la humedad

liberada del ave oscura no estrellada

porque parece que lloraras

orillada a la ventana

convirtiendo los sueños 

con tus avidos dedos,

caminando como en nostalgia

por la impùber claridad del sentimiento,

lùcida de esta hora que anda,

a solas,

a ciegas,

a cuestas.



08.nov.99